Las 7 claves para ahorrar después de vacaciones

Ahorrar después de vacaciones es posible. Te doy las claves para conseguirlo. ¡Dale un respiro a tu economía con estos consejos!

Ahorrar después del verano

El verano va llegando a su fin, y probablemente uno de los momentos que se hacen más cuesta arriba es gestionar todo lo que implica la vuelta a las rutinas. Una de las cosas que más nos suelen preocupar es cómo ahorrar después de vacaciones, ya que por lo general septiembre es un mes que se caracteriza por desembolsos económicos como la vuelta al cole, material escolar, transporte para acudir al trabajo o los gastos cotidianos de aquellas actividades que desempeñes a diario.

Por ello, en este post me he propuesto darte algunas claves que creo que pueden ayudarte a estabilizar la economía familiar sin que pase demasiada factura al bolsillo.

Ahorrar después de vacaciones es posible.

Cuando mencionas a alguien la idea de ahorrar después de vacaciones, ya de por sí resulta complejo de creer, ya que tendemos a pensar que no es posible. Pero déjame decirte que, siguiendo una serie de recomendaciones que te explico a continuación, sin duda estarás un paso más cerca de lograrlo.

 

1. Registra todos los gastos

La única forma de controlar lo que gastas es llevando un registro. Ya sea de forma manual o digital, incluso mediante herramientas o la App de tu banco, anota cualquier gasto que vayas teniendo, por insignificante que parezca, ya que al final será lo que te va a permitir tener una visión global de los gastos. Esta es una de las claves más importantes si te preguntas cómo ahorrar después de vacaciones.


Un buen tip es clasificar los gastos por grupos o categorías, así sabrás a qué áreas destinas más dinero al día, a la semana y al mes. ¡Te sorprendería la cantidad de conclusiones que puedes sacar si utilizas este método!

2. Planifica un presupuesto estimado

Junto al registro anterior, también es muy importante empezar determinando un objetivo de ahorro. De esta manera, en base a él, podrás fijar un presupuesto estimado, teniendo en cuenta gastos fijos y variables.

Debes marcar una cantidad realista que se adapte a tus necesidades y estilo de vida, y cumplir con lo que has determinado. Compara los ingresos y los gastos e intenta fijar el objetivo en un ahorro de entre el 10-15% de los ingresos.

3. Organiza con antelación

Si bien es muy difícil controlar absolutamente todo, una recomendación que puede venirte bien es que organices con antelación algunos aspectos diarios como:

  • Menús de comidas y cenas
  • Lista de la compra

Así sabrás de antemano qué productos tienes que comprar y de los que puedes prescindir y ahorrarás tiempo y dinero. Además, con este tipo de planificación podrás aprovechar ofertas y descuentos interesantes.

4. ¡No te olvides de los imprevistos!

Por mucho que nos propongamos ahorrar después de vacaciones, siempre estamos expuestos a sufrir algún imprevisto que haga tambalear las cuentas mensuales. Sin embargo, una recomendación que puede ayudarte es establecer una pequeña cuantía destinada a este tipo de gastos que cuesta prever. 

Si necesitas un empujón, también puedes recurrir a vender artículos de mobiliario y decoración o prendas de ropa que ya no utilices para sacar un dinerillo extra.

5. Marca metas a medio y largo plazo

Vivir el día a día está bien, sin embargo no se ajusta del todo a la realidad. Si queremos llevar una economía estable, es conveniente fijar también objetivos a medio y largo plazo. ¿Piensas cambiar de casa? ¿Tienes previsto un viaje? ¿Te gustaría organizar una reunión entre amigos? Todo este tipo de situaciones tienes que contemplarlas y, en función de ello, estimar el tiempo y la cuantía que puedes necesitar para conseguirlo sin pasar grandes apuros monetarios.

6. Transferencias automáticas, pero con cabeza

Una buena alternativa para ahorrar es determinar una serie de transferencias o movimientos bancarios que tengas de forma recurrente y automatizar su pago. Así no tendrás que preocuparte de no poder cubrir aquellos gastos fijos imprescindibles.

Pero debes hacerlo sin perder de vista esta dinámica, ya que es dinero que tienes que destinar a algo de forma automática y tienes que contar con ese gasto desde el principio, para luego no llevarte sorpresas. 

7. Siempre existe margen de mejora para ahorrar después de vacaciones

No te preocupes si no sale como esperabas al principio, administrar el dinero no es una tarea sencilla, y requiere de tiempo y dedicación, pero ver cómo vas consiguiendo pequeños pasos seguro que te da el impulso necesario para seguir. Piensa que siempre puedes detectar pequeños errores y reconducirlos.

 

¿Tienes pensado aplicar alguno de estos consejos para ahorrar después de vacaciones? Te aseguro que si los aplicas de manera constante notarás los resultados a final de mes. Todo es cuestión de una buena planificación y de establecer prioridades que nos permitan alcanzar los objetivos marcados. ¡Ánimo, conseguirlo es más sencillo de lo que parece!

#TuAgenteCaser